Oddun: Iwori Meji
En un tiempo de gran confusión, los habitantes de un pueblo enfrentaban problemas que parecían no tener solución. Cada intento de resolverlos terminaba en más caos, y la desesperación crecía entre ellos. Sin saber qué hacer, acudieron a Orunmila, el Orisha de la sabiduría y la adivinación, buscando su ayuda.
Orunmila escuchó las preocupaciones del pueblo y, en lugar de ofrecer una solución inmediata, les pidió paciencia. “Cada problema tiene su raíz y cada raíz necesita tiempo para ser descubierta,” les dijo con calma. Decidió enseñarles el poder de la reflexión y la paciencia en lugar de actuar impulsivamente.
Durante varios días, Orunmila realizó ceremonias de meditación y observación, estudiando las energías y caminos que los habían llevado a ese estado. Lentamente, empezó a ver patrones ocultos en los problemas, y reveló a los habitantes que las dificultades no se resolverían con acciones rápidas, sino con comprensión y ajustes graduales.
Con el tiempo, el pueblo aprendió a analizar y entender sus propios problemas en lugar de apresurarse. Gracias a la enseñanza de Orunmila, recuperaron el equilibrio y comprendieron que la paciencia y la reflexión eran sus mejores herramientas para la vida.
Reflexión:
Este pataki, de acuerdo con el oddun Iwori Meji, nos enseña que la paciencia y la sabiduría son necesarias para enfrentar los problemas. Orunmila nos muestra que la verdadera solución requiere tiempo y observación, recordándonos que debemos evitar las acciones impulsivas y aprender a ver las raíces de nuestros desafíos.